Hace un tiempo tuve la posibilidad de leer una interesante obra de Harbey Peña Sandoval, Conciliación y mediación narrativa teoría, práctica y reflexión, quien habla, entre otros temas muy interesantes, del enfoque narrativo de los factores en la resolución de conflictos.

Al analizar estas narrativas, se refiere, citando a otros autores, a los discursos del odio, y cómo éstos “juegan un papel importante en la evolución de la violencia y conllevan a la destrucción”.

También sostiene que “los discursos del odio incluyen la desvalorización y la deshumanización dirigidas a un chivo expiatorio. Estos discursos transportan ideologías destructivas. Para las personas expuestas a los discursos del odio, las narrativas se convierten en su realidad, es decir, se normalizan. Con esto, se puede incrementar la intensidad de dicho discurso y las personas se preparan para la violencia que puede llevar a una exclusión política, social y al genocidio (Vollhardt, et, al 2006)”.

Luego, citando a Sara Cobb se refiere a la estructura de las narrativas duras en los discursos del odio. «La estructura de las narrativas duras en los discursos del odio es: 1.- Una persona denigra de otra. 2. Existe una «orden» en contra de la recontextualización, aquel que lo haga será tachado como el otro. 3. Existe una «orden» para crear una narrativa dura. 4.- Una vez el patrón es establecido, se presenta una espiral de silencio en la cual circula el discurso del odio o narrativa dura y con esto dicha narrativa es difícilmente desafiada (Cobb, 2013, pág. 85)» (PEÑA SANDOVAL, H. (2021). (1.ª ed., p. 265). COLOMBIA: TIRANT LO BLANCH. Recuperado de HTTPS://EBOOKS.TIRANT.COM/CloudLibraty/ebook)

Son interesantes estas ideas y análisis de la estructura de las narrativas del odio para pensar cómo se construyen las mismas en los diferentes niveles, desde lo familiar, organizacional, nacional, internacional.

También para reconocerlos en aquellos casos donde se instalan en forma deliberada generando fuertes divisiones para lograr beneficios personales y las nefastas consecuencias que producen.

Estas narrativas no se desactivan solas, una vez iniciadas, comienzan una espiral de escalada que puede y debe ser modificada.

La buena noticia es que es posible trabajar en generar narrativas alternativas que las superen antes de llegar a resultados sin retorno o destructivos.

Estos temas forman parte de los contenidos de este nuevo campo de la prevención, administración, gestión y transformación de conflictos, espacio de los “operadores” de conflictos entre los que nos encontramos los mediadores.

Viendo lo que nos está pasando como humanidad en los diferentes niveles desde lo personal hasta internacional, donde con frecuencia se dan acusaciones cruzadas, acudiendo forma deliberada o no, a estos discursos, y a los escenarios que nos llevan las mismas, cabe preguntarse sobre la necesidad de hacerlos visibles, analizarlos y pensar historias alternativas superadoras.

Construir nuevas narrativas no es algo que se dará en forma espontánea.

Hay mucho por hacer desde el nivel individual y colectivo, saliendo del buscar el “enemigo” en el otro para pensar las propias responsabilidades en la co- construcción de los mismos, reconociendo al otro como un “otro” legítimo, reconociendo los valores compartidos y diferentes en verdaderos espacios de diálogo y no “parodias”, buscando construir nuevos escenarios que incluyan a todos desde la diferencia.

Este es un trabajo que requiere voluntad y acciones concretas desde todos los niveles y sectores que se sostenga en el tiempo.

La historia nos da ejemplos más que suficientes además de constructores de estos discursos, de los efectos que tuvieron en el pueblo y las civilizaciones y cómo terminaron quienes tomaron los mismos en su beneficio propio.

Hay mucho por construir, hay mucho material para analizar.

En este campo, quienes trabajamos en el campo de los conflictos, tenemos mucho para profundizar y aportar.

¿Qué opinan colegas?

MAG. DANIEL MARTÍNEZ ZAMPA

Sígamos en las redes

Comentarios

comments

¿Le parece interesante este artículo? ¡Compártalo en sus redes!