Por Atilio Arcidiácono
azulgris17@yahoo.com.ar
Un error común es dar a los acuerdos la fortaleza que poseen las normas.
Lo acordado debe satisfacer el interés de todas las partes.- Lo contrario, lleva en sí el germen del no cumplimiento.
Todo acuerdo debe partir de lo mínimo realizable por las partes y la determinación de “realizable” y “posible” debe expresarlo cada una de las partes- Lo contrario, que una de las partes (por ejemplo la Escuela, o quien la representa) trate de definir lo que es interés de las partes o lo que estas pueden comprometerse a cumplir o lo que es posible cumplir, implica contaminar el acuerdo con el germen del fracaso, a corto o largo plazo.
Pero ¿cuáles son las razones para acordar?, podríamos responder el “interés” de las partes por acordar- Esto nos llevaría a reflexionar sobre los intereses de las partes- Es decir debemos poder aceptar que libremente las partes expresen cuál es su interés, aún cuando dicho interés se oponga al nuestro o hasta al de la misma propuesta- Conocer el real interés de cada parte nos llevaría a entender las causas de sus posicionamientos en la negociación-
Lograr que cada una de las partes no que expresen lo que creen es “conveniente oigan las otras partes” como su interés, sino su real “interés” sobre el tema- Nos permitiría formalizar un acuerdo realizable-
Lo que genera el deseo de mantener el acuerdo, es el interés satisfecho- Puede suceder que el interés de un momento cambie, porque las circunstancias cambian y el interés actual, distinto al del momento de acordar, al no verse satisfecho, sea la causa de la ruptura del acuerdo-
Es que todo acuerdo amerita etapas, a modo de ejemplo sería:
1- Plantear necesidades-
2- Plantear intereses-
3- Buscar opciones que cubriendo los intereses resuelvan las necesidades de todas las partes
4- Análisis de cada propuesta (análisis desde lo deseable de la misma pero también desde la factibilidad de logros)
5- Elección de una propuesta
6- Escritura del acuerdo
7- Establecer fechas de revisión
8- Establecer posibilidades de encuentro ante la posibilidad que alguna de las partes pueda no continuar con el acuerdo (PREVIO AL NO CUMPLIMINETO)
9- Seguimiento del acuerdo
10- Evaluación del sentimiento de las partes en la aplicación del acuerdo
11- Información los más rápida posible que se detectan dificultades en cumplimentar el acuerdo o que no se ha cumplido…
El no prever la lista que antecede o alguna organización similar conlleva a que no se percibe el momento en que el acuerdo se deja de lado por una o varias partes, esto conllevaría a una cultura de no respeto por los acuerdos, perdiéndose esta importante herramienta o desluciéndose-
Cuando el acuerdo lleva si la posibilidad de no cumplirlo con aviso previo y posibilidad de reestructuración en vez de no cumplirlo simplemente, se ayuda a que las partes no se sientan traicionadas- Hasta puede servir para que se reconozca, que a uno mismo ya el acuerdo no le está sirviendo sentarse a hacer un nuevo acuerdo-
Tratemos de pensar causas que hacen que un acuerdo no se cumpla:
1- no se respeto el interés de las partes, se impuso el interés de una de las partes
2- se aceptó el acuerdo para evitar un mal mayor
3-el acuerdo establece un agrupamiento, alianza, que sirve para que otros deban hacer acuerdos por otros temas
4-el acuerdo da tiempo para que uno se posiciones distinto, incluso frente al mismo acuerdo
5- nunca se pensó en cumplir con el acuerdo, pero así se evitó exponerse
6- al considerar que las otras partes no están cumpliendo con el acuerdo o lo están bastardeando
7- porque después de acordar uno siente que la otra parte o partes han sacado ventaja sobre uno
Lo que antecede son simplemente algunas opciones de las muchas que pueden existir-
Poder darnos cuenta que existe un abanico de opciones que llevan al incumplimiento del acuerdo, nos ayudaría a ser más cuidadosos en el momento de acordar y en el tiempo y dedicación que otorgamos al seguimiento del acuerdo-
Se puede imponer el propio interés, se puede convencer, se puede confundir al otro, hasta se puede presionar y obligar a acordar lo que no se desea ( la historia esta plagada de ejemplos en este sentido) pero no se puede confiar en el éxito del acuerdo, logrado o tratado de esta manera- Estos acuerdos llevan en sus genes, el incumplimiento, el boicot y hasta el fracaso…generan alianzas que promueven conflictos en otros frentes y provoca un desgaste tal que lejos de servir terminan por agotar y abrumar-
Acordar sin verdaderamente respetar los intereses de los otros, para sostener el acuerdo, se hace necesario generar un sistema represivo lo que a su vez genera una clima de mayor violencia-
Parecería demasiado dramático, pero es lo que sucede en la Escuela cuando se negocia sin respetar en realidad los intereses de alumno/alumnas o de los padres o de los docentes-
Es la aplicación de un sistema de convivencia no consensuado, que permanentemente se boicotea por parte de los alumnos/as- Ante ello la dirección generaría una mayor represión- Con lo que se generaría una mayor resistencia y la ineficiencia por inaplicabilidad del sistema de convivencia, el desborde de los docentes y un mundo de sanciones que generarían mayor resistencia…..
Lo cierto es que acordar implica “reconocer” al otro “como un igual”-
Con los mismos derechos-
Otro que merece ser escuchado, tenido en cuenta-
En realidad “acordar”, lo que realmente es “acordar” implica una actitud de respeto y aceptación por las diferencias-
Concluyendo
El verdadero logro de un acuerdo no consiste en cumplir con las expectativas de logros respecto a lo acordado, el verdadero éxito consiste en que las partes deseen volver a sentarse a dialogar y a acordar.